martes, 9 de diciembre de 2014

Henri Bergson

La inteligencia se caracteriza por una incomprensión natural de la vida.

La libertad es un hecho, y entre los hechos que observamos, no hay ninguno que sea más claro.

Debemos obrar como hombres de pensamiento; debemos pensar como hombres de acción.

La contemplación es un lujo, mientras que la acción es una necesidad.

Para un ser consciente, el existir consiste en cambiar, en madurar, en crearse indefinidamente a sí mismo.

El ojo ve sólo lo que la mente está preparada para comprender.

El poder que motiva a la democracia es el amor.

No hay nada en filosofía que no pueda expresarse en lenguaje cotidiano.

Siempre que hay alegría hay creación.

El genio es aquello que provoca la inercia de la humanidad a aprender.